Cerca de 40 nuevos letrados se unen a las filas de la Abogacía granadina en una ceremonia de Jura o Promesa

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El Colegio de Abogados de Granada celebra una solemne ceremonia de Jura o Promesa para recibir a los nuevos colegiados que se incorporan a la Corporación


“Acabáis de prestar solemne juramento o promesa; si lo cumplís, honraréis a vuestra profesión y vuestro Colegio; en caso contrario, ambos os lo demandarán”. Con estas palabras fueron recibidos los nuevos letrados que participaron en la solemne ceremonia de Jura o Promesa celebrada en el Colegio de Abogados de Granada en la mañana del 11 de octubre.

Un acto que se integra en los actos de Santa Teresa, patrona de la Abogacía granadina, y con el que la Junta de Gobierno de la Corporación dio la bienvenida a los cerca de 40 colegiados que se incorporan al colectivo profesional. Así, siguiendo una ceremonia centenaria, los jurandos y promitentes recorrieron el pasillo del Salón de Actos, respaldados por sus padrinos y bajo la atenta mirada de familiares y amigos, para formalizar su compromiso con la profesión y con el tercer colegio de abogados más antiguo de España.

De ahí que el decano, Leandro Cabrera, les recordara su “obligación de acrecentar el ingente acervo jurídico, social y cultural” de una corporación con más de cinco siglos de historia. No obstante, el máximo representante de la Abogacía granadina también trasladó a los nuevos colegiados la importancia de que sigan su vocación, pues es el motor interno que les garantizará el éxito; de que sean valientes y asuman retos y riesgos, evitando caer en el círculo de confort y perdiendo el miedo al fracaso; de que trabajen con excelencia, estando preparados a través de la formación continua; de que mantengan un comportamiento ético y respetuoso con las normas deontológicas, ya que hay principios y valores que deberían ser insustituibles; y de que aprovechen las oportunidades que abren hoy día las nuevas tecnologías y el mundo digital.

“No olvidéis que nuestra profesión es dura peor atrayente y atractiva; difícil, pero libre e independiente; de largo recorrido, pero apasionante”, concluyó el decano, invitando a los ya abogados a participar de la vida y actividades del Colegio, su nueva “casa profesional”.